Las poblaciones excluidas deben organizarse y resistir a políticas que permiten el expolio de los recursos naturales y el acaparamiento de tierras, que orquestan la privatización de los bienes comunes y agravan su gran precariedad.
Emaús lucha a su lado para:
- Crear una conciencia ciudadana y política frente a la crisis social, ecológica, moral y económica que vivimos actualmente.
- Construir y proteger un mundo sostenible para las generaciones futuras, que garantice los derechos sociales de todas las personas, sin gastar más recursos naturales de los que la tierra pueda regenerar.
- Democratizar los sistemas de decisión pública para que las personas más excluidas estén en el centro de las soluciones y políticas que se propongan.
- Establecer una verdadera justicia ecológica: por una parte, el acceso justo a los recursos naturales y a la soberanía de los pueblos, en contra de su privatización; por otra parte, la responsabilidad civil y penal de los Estados o actores económicos responsables de los expolios, la contaminación y la violación de derechos.
- Defender la soberanía alimentaria y la agroecología, respetando el derecho de los pueblos a una alimentación saludable y culturalmente apropiada, producida con métodos sostenibles.