José Aravena es el fundador y el presidente del grupo Emaús Las Urracas de Chile. En calidad de miembro del comité provisional de preparación de la Asamblea General fundadora de 1969, intervino en la plenaria de la jornada de celebración del 50º aniversario del Manifiesto Universal, el 24 de mayo de 2019, en el Parlamento Federal suizo de Berna. Habló de las razones que, en ese momento, le alentaron para llevar a cabo el proyecto de creación de Emaús Internacional y a participar en la redacción de su texto fundador.
“A raíz del naufragio en el Rio de la Plata del Abbé Pierre, el fundador compartió con nosotros la inquietud de lo que podría haber pasado, si él hubiera sucumbido en el naufragio ya que él era el único que tenía todos los contactos y conocía los grupos en el mundo. Esto sucedió en 1963.
Conversó con nosotros la necesidad de generar algún medio de enlace, a nivel internacional. En esa perspectiva nos planteó la posibilidad de visitar para establecer relaciones con los grupos Emaús, que habían en Lima.
Como forma de crear algún tipo de organización, o secretariado y elaborar o proponer un “Manifiesto” que contuviera los lineamientos centrales de Emaús y que fuera común a todos los grupos, el Abbé Pierre trabajó una primera propuesta en base a su experiencia en la Primera Comunidad Emaús, estableciendo los siete puntos básicos, lo que fue intercambiando entre los grupos Emaús.
Hasta que en 1967 se forma el primer comité provisorio con representantes escogidos por el Abbé Pierre, de distintas regiones del mundo, para avanzar en la redacción del Primer Manifiesto y luego para convocar a un primer encuentro de los grupos Emaús, lo que fue la Primera Asamblea Mundial en Berna en mayo de 1969.
Reflexion sobre el Manifiesto
Durante el periodo posterior al naufragio del Rio de la Plata, nos sentimos motivados a estudiar más en profundidad de la experiencia y la aventura de los compañeros de Emaús en Francia y a conocer algo más de la sabiduría y del planteamiento del Abbé Pierre, expresados en distintas conferencias o intervenciones realizadas en diferentes eventos a los cuales era invitado. Nos sentimos atraídos por el planteo de trabajo, comunidad y servicio que constituía el núcleo central de la praxis y del mensaje de las comunidades Emaús en sus orígenes. Respecto a los planteos sociales y políticos señalados por el Abbé Pierre en sus distintos escritos y conferencias, nos llamó profundamente la atención.
Los preliminares de la libertard
El Abbé Pierre constata que terminada la segunda guerra mundial las potencias vencedoras hacían alarde de que había sido derrotado el fascismo y triunfado la libertad. En esas circunstancias el Abbé Pierre se interroga e interrogaba al público acerca de qué es realmente “la libertad” para los países pobres que padecían de hambre y enfermedades y qué podía significar la libertad para los miles de pobres de los países ricos que carecían de una vida digna, a pesar de que ellos fueron los que entregaron los mayores sacrificios para el triunfo de la segunda guerra mundial.
El Abbé Pierre plantea que para que los seres humanos, puedan ser realmente libres necesitan que la sociedad les pueda asegurar un acceso adecuado a:
- Una Alimentación adecuada y con los suficientes nutrientes para su desarrollo.
- Un pleno bienestar contando con, Salud física, mental y social, universal y gratuita. No solo la ausencia de enfermedad
- Una Vivienda digna con espacios de acogida, que faciliten la convivencia y la seguridad.
- Trabajo decente, bien remunerado y con una seguridad social que asegure una vida confortable.
- Acceso al conocimiento que involucra una educación gratuita pública y de excelencia y el acceso a una información amplia y veraz que facilite una conciencia crítica.
A modo de sintesis, nos atrajo profundamente el llamado que hacía el Abbé Pierre: “guerra a la miseria, a sus causas y sus responsables” trabajando por la justicia y compartiendo mis luchas individuales y colectivas, hasta la destrucción de las causas de la miseria.
En terminos proféticos esto significaba:
- Denunciar al sistema capitalista y el imperio del norte como el gran enemigo de la humanidad, del medio ambiente y de la madre tierra.
- Anunciar que otro mundo y que otra vida es posible en la medida que los pueblos pobres, los pobres de todos los pueblos y los pueblos originarios se organicen para construir un mundo fraterno y libre de explotación.
- Proponer la construcción de una sociedad basada en los Bienes Comunes de la sociedad en función del Buen Vivir y el respeto y armonía con la Madre Naturaleza.
Para finalizar, Las Urracas estuvimos presente en este acto fundacional de Emaús Internacional, un recuerdo especial para nuestro compañero Oscar Pregnan, que participó en la delegación de Las Urracas; al Abbé Pierre como genial conductor e inspirador, a Marcel Farine, como el gran organizador de esta tremenda acción, José Balista, vicepresidente, hombre intelectual y estudioso de Emaús y tantas compañeras y compañeros que a través del mundo han hecho su aporte para que Emaús siga en el camino de “Servir primero a los que más sufren” y de participar en la construcción de un mundo justo y solidario.”
Photo : ©Patrick Piro
